
El expresidente Evo Morales ha comenzado una huelga de hambre el 1 de noviembre, buscando fomentar un diálogo con el Gobierno de Luis Arce, tras 19 días de protestas y bloqueos de carreteras por parte de sus seguidores en Bolivia. En una declaración a la prensa realizada en la región cocalera del Chapare, en el departamento de Cochabamba, Morales afirmó: “Para priorizar el diálogo voy a iniciar una huelga de hambre hasta que el Gobierno instale mesas de diálogo”. Además, solicitó que “para que el diálogo sea viable, responsable y tenga resultados, pido la participación de organismos internacionales de países amigos”.
Contexto de la huelga de hambre
Morales expresó su deseo de evitar el derramamiento de sangre y enfatizó que siempre ha buscado un diálogo sincero. En este sentido, hizo un llamado al Pacto de Unidad y al Estado Mayor del Pueblo para considerar un cuarto intermedio en los bloqueos de caminos, mientras él y sus seguidores se declaran en huelga de hambre. En su mensaje, Morales también mencionó: “Iniciamos la huelga de hambre desde el Territorio de Lucha, convencidos de la necesidad de encontrar soluciones a los problemas que hoy enfrenta el pueblo boliviano”.
Temas a discutir en el diálogo
El exmandatario indicó que en las mesas de diálogo se discutirían dos temas principales: el tema económico y el tema político. En relación al primer tema, Morales explicó que espera abordar con la administración de su exministro la crisis económica que ha surgido debido a la falta de dólares, lo que ha restringido las importaciones de combustible que Bolivia vende a precio subsidiado.
Respecto al tema político, Morales confió en que se pueda tratar la situación de dirigentes que, según él, han sido injustamente detenidos y encarcelados en el contexto de las protestas que comenzaron hace 19 días, en oposición a su posible aprehensión por un caso de estupro que supuestamente ocurrió durante su presidencia en 2015.
Reacción del Gobierno de Luis Arce
En respuesta a la situación, el presidente Luis Arce utilizó su cuenta de X para afirmar que: “Nuestro Gobierno siempre ha apostado por el diálogo, pero no es posible ningún diálogo mientras se siga asfixiando la economía de las familias bolivianas y se vulnere el derecho al acceso de alimentos, combustible y medicamentos”, en referencia a los bloqueos de carreteras.
Arce también mencionó que se había dado un primer paso al desbloquear Cochabamba hacia el occidente del país, y continuaría trabajando para liberar este departamento de lo que él describió como un secuestro. En su mensaje, expresó su solidaridad con los policías y militares que han resultado heridos, así como con sus familias.