El nombre de Frances Haugen ha estado en todos los portales de noticias en estos días, dado que sus revelaciones compiten en relevancia ni más ni menos que con las de los “Pandora Papers”.
Frances Haugen trabajaba como gestora de productos en el equipo de integridad cívica de Facebook. Esto le permitió tener acceso a documentos privados de la empresa, muchos de los cuales hizo públicos recientemente.
En una entrevista con el programa 60 Minutes de la cadena estadounidense CBS, dijo que los documentos que filtró demuestran que la empresa puso repetidamente “el crecimiento por encima de la seguridad” de sus usuarios.
Facebook alegó que la filtración es engañosa, una interpretación sesgada de los datos, y que pasó por alto la investigación positiva realizada por la compañía.
En la entrevista, Haugen dijo que había dejado Facebook a principios de este año después de exasperarse con la compañía. Antes de partir, copió una serie de memorandos y documentos internos.
La denunciante luego compartió miles de páginas de esos documentos con el diario The Wall Street Journal, que ha publicado el material por partes durante las últimas tres semanas. A la revelación se le ha denominado “Archivos de Facebook” o “Facebook Files”.
Las revelaciones incluyeron documentos que mostraban que celebridades, políticos y usuarios de alto perfil fueron tratados de manera diferente por la empresa. De acuerdo a lo filtrado, Facebook habría aplicado las políticas de moderación conocidas como “XCheck” (verificación cruzada) de forma diferente a estas cuentas. O no las habría aplicado en absoluto.
Otros problemas para Facebook revelados por Frances Haugen
Otra filtración dejó al descubierto la compleja demanda de un grupo de sus propios accionistas al que se enfrenta Facebook.
El grupo alega, entre otras cosas, que el pago de US$5.000 millones de Facebook a la Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos para resolver el escándalo de datos de Cambridge Analytica fue tan alto porque fue diseñado para proteger al fundador Mark Zuckerberg.
Pero son las acusaciones sobre Instagram (app que pertenece a Facebook) las que han sido particularmente preocupantes para los políticos estadounidenses. Una investigación encontró que esta red social estaba afectando la salud mental de los adolescentes, pero no compartió sus hallazgos aún cuando sugirieron que la plataforma era un lugar “tóxico” para muchos jóvenes.
Según los documentos publicados por The Wall Street Journal, el 32% de las adolescentes encuestadas dijeron que cuando se sentían mal con su cuerpo, Instagram las hacía sentir peor.